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Moderna ultima permisos para vacuna en bebés y ya piensa en una inoculación anual COVID+Gripe

Europa, Canadá y Australia ya autorizaron Spikevax, la vacuna de Moderna, en niños y la FDA de Estados Unidos evaluará su uso en bebés a partir de los 6 meses.


Más de 225 virus infectan a los humanos en todo el mundo, pero solo existen vacunas disponibles para apenas 25 de ellos (10%).


“Moderna tiene la oportunidad de impactar positivamente en la salud pública mundial. Con los 31 programas de desarrollo que tenemos activos, y gracias al poder de nuestra plataforma de ARNm, esperamos abordar varias necesidades médicas críticas no satisfechas", afirmó Stéphane Bancel, CEO de Moderna, en el marco del Moderna Vaccines Day, el evento mundial en el que se anunció la agenda de investigaciones y lanzamientos de la compañía.


Si el uso de ARN mensajero (ARNm) funciona para una enfermedad, debería funcionar para muchas otras. Esta es la premisa rectora que actualmente lidera los esfuerzos de investigación de Moderna, que se propone mejorar significativamente la forma en que se descubren, desarrollan y fabrican los medicamentos.


La clave de su innovación actual está centrada en un enfoque múltiple, que busca aliviar la carga global de infecciones respiratorias con vacunas dirigidas a los principales agentes causales, incluidos el virus SARS-CoV-2, el virus de la influenza, el virus respiratorio sincitial (RSV) y los cuatro coronavirus humanos endémicos (HCoV).


“Todas las vacunas que elaboramos y ponemos en el mercado tienen exactamente la misma tecnología a nivel químico, el mismo proceso de elaboración, se realizan con los mismos dispositivos técnicos y equipo humano. Esto es lo que hace única a la tecnología ARNm”, agregó a CEO de Moderna.


COVID-19 A medida que el COVID-19 pasa a una fase endémica, Moderna se enfoca en sus variantes, desarrollando refuerzos multivalentes para lograr la inmunidad y protección más amplias para las personas de alto riesgo y promover una vacuna estable.


La vacuna de Moderna para el COVID-19, Spikevax, está aprobada para su uso en niños de entre 6 y 12 años en Europa, Canadá y Australia. Además, la empresa presentará en las próximas semanas una solicitud de autorización de una serie primaria de dos dosis para niños de 6 meses a 6 años a la FDA (Administración de Drogas y Alimentos de los EE.UU.), a la Agencia Europea de Medicamentos (EMA) y a otros reguladores globales, ya que los estudios clínicos realizados han evidenciado su éxito en la generación de anticuerpos robustos, similares a los resultados en los adultos.


“Seguiremos adelante con las presentaciones reglamentarias para bebés y niños tanto en EE.UU. como en el resto del mundo”, dijo Jacqueline Miller, vicepresidenta senior, jefa del Área Terapéutica, Enfermedades Infecciosas de Moderna.


COVID+Gripe Además de los efectos de la pandemia, en todo el mundo la influenza provoca anualmente de 3 a 5 millones de casos graves y es responsable de entre 290 y 650 mil muertes respiratorias relacionadas con la influenza. Si bien hay tres tipos principales de virus de influenza (A, B y C), que infectan a los humanos, son los virus “A” los que provocan más del 95% de las hospitalizaciones. Moderna está avanzando en tres estrategias de desarrollo de vacunas específicas contra la influenza, cada una con niveles crecientes de mejoras destinadas a mejorar las respuestas inmunitarias.


“Nuestro objetivo es desarrollar vacunas para tratar las infecciones respiratorias y, finalmente, combinar muchas en una sola vacuna de refuerzo anual, con el objetivo de reducir la morbilidad y la mortalidad significativas causadas por estos virus”, dijo Stephen Hoge, presidente de Moderna.


En el evento Moderna anunció que en este 2022 comenzará con un ensayo de fase 1 de la vacuna contra la influenza + COVID-19 en adultos sanos de 18 a 75 años.


Además, la compañía ya lanzó un programa de vacunas respiratorias combinadas para atacar tres de los virus más importantes que causan enfermedades respiratorias en adultos mayores. El nuevo candidato a vacuna respiratoria combinada se prevé como un refuerzo anual dirigido al virus SARS-CoV-2, el virus de la influenza y el RSV (virus respiratorio sincitial).

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